¿Qué vas a ver aquí?
Si crees que no estás obteniendo la mejor calidad de imagen de tu TV de alta definición, aquí tienes varios consejos para una mejor experiencia visual.
¿Ajustes de fábrica de la smart TV? Lucen bien en tienda, no en tu salón
A veces, los ajustes de fábrica de las TV han sido definidos para que la pantalla luzca mejor en la tienda. Muchos parámetros se han maximizado para que la imagen salte desde la pantalla. Sin embargo, la verdad es que muchos de estos ajustes no son los más indicados para el salón de tu casa. Así, por ejemplo, unos colores que llamen mucho la atención tienden a ser feos y poco verosímiles, y pueden sustraer nivel de detalle a la imagen.
Si vas al icono de ajustes de tu tele, verás qué configuración de imagen tiene y podrás entretenerte personalizando las diferentes variables que intervienen en la calidad y la formación de las imágenes.
En este post te decimos los pasos que debes seguir para obtener una mejor calidad de imagen de tu televisor
Cambia el modo de imagen de la televisión
Abre la tele y toma el mando a distancia. Si vas al icono de ajustes, y te vas al apartado de imagen, la mayoría de televisiones te permiten elegir entre diferentes modos de imagen: dinámico, estándar, natural, cine, etc. Todos estos modos, a su vez, son combinaciones de diferentes valores de parámetros de imagen. Gracias a los modos de imagen, puedes ahorrarte la tarea de ir calibrando las diferentes características de la televisión, una por una. La parte negativa es que no personalizas la imagen y no eres fiel al 100% a tus gustos y tus expectativas.
Si ya te resulta cómodo recurrir al modo de imagen, elije el que percibas que te da una mejor experiencia como espectador. Evidentemente, se trata de una cosa que puedes cambiar sobre la marcha. ¿Quieres ver una película? Pues cambia al modo cine. Cuando acabe el filme, vuelves a poner el modo estándar o natural.
¿Qué modo de imagen de TV es mejor?
Una constatación que puede ser útil: cuando estás acostumbrado a un modo, y pruebas otro distinto, te puedes sentir decepcionado. Prueba por ejemplo a pasar de la configuración de imagen dinámica o estándar, al preset de cine: te va a parecer muy oscuro. Pero más bien se trata de que el modo dinámico es demasiado intenso: demasiado brillante, sobresaturado y poco natural.
Cuando te pongas a ver una película, te darás cuenta de que con el modo cine la experiencia visual es mucho más buena. En general, cuando ves un filme en la tele, los colores del modo cine son mucho más fieles a las imágenes reales, de la vida cotidiana. Y no solo eso, sino que son colores con más autenticidad artística, porque son más cercanos a la voluntad del director: los ves como el autor del filme quiere que los veas. Las imágenes proyectan una calidad cinematográfica característica, que notas aún más si te pones a ver la película en la oscuridad.
Para la gran mayoría de usuarios, el modo estándar ofrece unos resultados correctos. Eso sí, hay que recordar que la calidad de la imagen va a depender también de la calidad del panel
Un consejo adicional: no utilices el modo con colores más vívidos, que te lo puedes encontrar bajo diferentes nombres: Vívido, Deporte, Dinámico o Brillante. Como hemos apuntado, una elección de colores demasiado intensos va en detrimento de la calidad de la imagen en su conjunto.
Desactiva las funciones de la TV innecesarias
Las televisiones vienen con configuraciones avanzadas con las que los fabricantes dicen que la imagen mejora de forma notable. Sin embargo, algunas de estas funciones son más bien reclamos de marketing, por lo que harías bien en desactivarlas.
Un caso claro, que veremos más adelante en más detalle, es el motion smoothing, que hace interpolación de frames: es decir, añade de forma artificial frames (imágenes por segundo) a la película.
Asimismo, si tu tele ya tiene algunos años, es probable que tenga la función Contraste dinámico, que se supone que debe mejorar la imagen en las escenas más oscuras. Sin embargo, es una buena idea que desactives esta configuración si lo que quieres es obtener una imagen más realista y de más calidad.
Otra función que es mejor desactivar es el Overscan (rellenar pantalla), una opción que tenía sentido en la época previa a las pantallas planas, cuando el diseño de las televisiones no era panorámico. Básicamente, se cortaba parte de la imagen por los bordes, para así conseguir la mejor presentación posible de esta en la pantalla.
Es bueno también decir que hay opciones que sí que te pueden aportar valor y mejorar la calidad de visionado, como por ejemplo el Local LED Dimming.
La nitidez de la televisión, en valores bajos
La nitidez (sharpness) tiene su truco, porque si la subes demasiado, lo que consigues es que los bordes de las imágenes resalten con un contorno o halo. La imagen resultante parece menos natural y pierde calidad. El objetivo es siempre que las imágenes en la TV sean nítidas, pero la mayoría de películas y de programas televisivos ya son suficientemente nítidos.
Por tanto, lo mejor es que fijes un valor bajo. Según la tele que tengas, la nitidez debería estar en el 0% y el 50%. Piensa que en el modo cine de la TV, el valor de la nitidez está establecido en 0%.
Alerta con el ‘motion smoothing’ o suavizado de movimiento
El suavizado de imagen o de movimiento tiene varios nombres, según el fabricante, pero al final se trata de suavizar la imagen en movimiento, de darle más fluidez. Al menos, esa es la intención. Esta suavización se obtendría con la adición de forma artificial de nuevos frames.
La mayoría de películas se reproducen a 24 o 30 frames por segundo. Con el motion smoothing, la televisión será capaz de añadir más imágenes por segundo. Recordemos que una TV de alta definición puede llegar a tener una tasa de refresco de 240 hz (240 imágenes por segundo).
El resultado indeseado de esta función se conoce como efecto soap opera, o efecto telenovela. Con el smoothing, una película bien filmada puede parecer un apresurado vídeo de YouTube.
Si juegas con la televisión, esta función te puede aumentar el lag, lo que es negativo para tu experiencia de gaming.
Cómo calibrar el televisor
Muchas veces, las configuraciones predeterminadas (modo de imagen) no te encajan. Así que es necesario ajustar las características de la imagen de forma manual, para lograr la máxima personalización.
Te ofrecemos algunas pautas para que ajustes las diferentes variables de tu smart TV a ojo.
- Para calibrar la televisión, elije algunas de tus películas favoritas, que presenten una suficiente diversidad de escenas en cuanto a iluminación. La idea es que haya escenas muy oscuras, muy claras, llenas de gente, con paisajes, con mucho color, etc.
- Ilumina el espacio donde tienes la tele como lo harías si fueses a ver una película.
- En las escenas oscuras, ajusta la configuración de brillo de manera que las sombras sean lo más negras posibles al mismo tiempo que se sigue apreciando detalle.
- Cuando la escena esté iluminada, sube el contraste para que los espacios en blanco sean lo más blancos posibles sin sacrificar nivel de detalle.
- Ajusta la temperatura de color hasta que los colores y tonalidades de la piel luzcan naturales en las escenas. Si un personaje exhibe una piel con un color extraño, eso significa que no has dado todavía con la temperatura de color adecuada.
- Recuerda que, para apreciar mejor qué configuración de una variable es la mejor, deberías apagar la TV unos minutos tras cada reconfiguración, para luego ver el cambio que representa el nuevo ajuste con ojos frescos.
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